08-17-2010, 01:14 PM
(Este mensaje fue modificado por última vez en: 08-17-2010, 01:19 PM por Walter Fulmer.)
Ayer suplí una grave carencia cultural con el visionado de I Hired a Contract Killer, del finlandés Aki Kaurismäki. Esta excelente comedia negra nos muestra una desvencijada ciudad -Londres- en la que confluyen las peripecias vitales de los tres protagonistas: un hombre gris que desea quitarse la vida, una vendedora de rosas y un asesino a sueldo.
El ritmo pausado, que muchos no dudarán en calificar de lento, es perfecto para el filme, que en sus planos muestra la degradación de la sociedad. Una vez más, el director finés recrea con gran acierto la sordidez y el mundo de los desheredados a través de la pesadilla del protagonista -interpretado por Jean-Pierre Léaud- y su posterior transformación, que hace que recupere las ganas de vivir. Muy kafkiana.
Ahora voy a ver algo del maestro Kiarostami.
El ritmo pausado, que muchos no dudarán en calificar de lento, es perfecto para el filme, que en sus planos muestra la degradación de la sociedad. Una vez más, el director finés recrea con gran acierto la sordidez y el mundo de los desheredados a través de la pesadilla del protagonista -interpretado por Jean-Pierre Léaud- y su posterior transformación, que hace que recupere las ganas de vivir. Muy kafkiana.
Ahora voy a ver algo del maestro Kiarostami.