09-22-2010, 12:01 PM
(Este mensaje fue modificado por última vez en: 09-22-2010, 12:03 PM por Walter Fulmer.)
Peor es lo que hacía un amigo mío, el susodicho se las robaba a cualquiera que osara jugar una partida en los recreos. Procuraba buscar un amplio grupo de gente y robar las cartas en pleno duelo, casi nunca le pillaban. Eso sí, el muy gilipollas las mangaba por diversión y muchas veces se las regalaba al gamberro de la clase.