11-24-2010, 08:51 PM
Era una mujer tan gorda, tan gorda, que cada vez que se acercaba al mar subía la marea.
Era una mujer tan gorda, tan gorda, que si le tirabas una piedra, ésta orbitaba alrededor de ella.
Era una mujer tan gorda, tan gorda, que ni la luz podía escapar de ella.
Era una mujer tan gorda, tan gorda, que si le tirabas una piedra, ésta orbitaba alrededor de ella.
Era una mujer tan gorda, tan gorda, que ni la luz podía escapar de ella.
Sin firma porque los de lycos son unos gaznápiros.