Cucu goes to Japan forever alone porque está así de majara.

[CucuFaiter]

Bueno, pues las anécdotas con el viaje a Japón ya han empezado y aún no me he ido xDDDD

Día de ayer: Jueves. Dos y media de la tarde y el Japan Rail Pass aún no ha llegado. Debido a los nervios en el curro saco batatas a un ritmo superior al habitual para goce y disfrute de mi padre y mi tío.

-Po éhte viene hoy potente. -Dicen mientras laburo junto a ellos a la par que hacen bromas sobre que dicha potencia proviene de la falta de compañía femenina nocturna.

Dicen de descansar un poco. Nos vamos los cuatro, mi padre, mi tío, el negro que trabaja con nosotros y yo a, como se dice por aquí, "echar el rengue". No sé si esta expresión es nacional o no xD

El teléfono de mi padre suena. Sé lo que es. Lo sé demasiado bien... ¡Problemas con el JRP!

-Gabi, ponte al teléfono, que es tu madre.
-¿Mamá?
-Gabi, que han llamado del "llapan rai" o algo así, que dicen que les tienes que enviar una copia del pasaporte ANTES de las cinco y media, que sino te llega el lunes, que es cuando tu te vas.

¡OLE SUS HUEVOS! Tambien podian haberlo especificado en la web, o que al menos, hubiese un apartado para poder adjuntar archivos que me indujese a pensar que les hacía falta dicha copia. O qué coño, simplemente que les funcionase el email de contacto que pusieron, que intentaba hablarles y me respondía "la máquina" con que no me había logueado ¡Las pelotas se me van a loguear!

-Bueno, mamá. No pasa nada ¿Tu tiraste la impresora que quité de mi cuarto?
-Yo no. Está en el almacén.
-Pues como tiene escaner voy, escaneo el pasaporte, se lo mando y en cinco minutos he terminado ¿Vas a estar en la casa?
-Si.
-Pues ya voy apara allá.

Le cuento todo a mi padre y, ante mi promesa de un rápido regreso, me dejan marchar. Como la furgoneta que tiene la mitad de las batatas cargadas está delante, pues me la tuve que llevar.

Salgo a toda ostia para mi casa. Llego allí en seis minutos y medio.

-Llegar, escanear, enviar, irse. Así de sencillo.

No.

Me pongo a rebuscar en el almacén entre los miles de cacharros que lo pueblan, cada uno con sus respetivos seis kilos de ácaros y mierda. Encuentro la impresora.

-Que raro... juraría que era negra.

Me la llevo para arriba.

-¿Pero que estás haciendo, niño? ¡Esa es la de tu hermana!

La impresora de mi hermana. Era la primera vez que la veía. La ha tenido por cuatro años, hasta que se ha roto, y nunca le había puesto un ojo encima. La devuelvo a su rincón de soledad, oscuridad y ácaros mutantes.

Sigo buscando entre la mierda. No encuentro nada. Al final mi madre, con sus superpoderes de madre, encuentra en un vistazo la impresora. La cojo y la subo a mi cuarto. La saco de la caja y:

-Mamá ¿Y los cables?

Los cables no están en la caja.

Y el tiempo pasa.

Nos ponemos a buscar los cables. Al final estaban en una caja random en un rincón random de un cuarto que ya no se usa. Los enchufo y:

-Un momento... ¿Yo no habré borrado los drivers, no?

Pues si, los he borrado. Y la página de HP es una puta MIERRRRRRDA. A descargar 250 MB de drivers.

Se bajan. Intento instalarlos pero el PC se cuelga. Reincio. Vuelvo a intentarlo. Se instalan. Lento. Muy lento. MÁS lento. Han terminado. Meto el pasapote, botón de escanear y...

-[¡ERROR! No te has dejado los dineros en carretes/tinta/mierda HP, por eso no podemos escanear tu asqueroso documento, sucio comunista]
-¿¿¿PERO QUIEN HA QUITADO LOS CARRETES??? Bueno... no pasa nada. Inspirar... espirar... flatulencia... expirar... Pongo unos carretes viejos que tengo aquí para cuando se me olvidaba que número de carrete llevaban, engaño a la impresora, me deja escanear y ya está.

Solo hay un carrete. La impresora no escanea así.

-¡¡¡¡¡FFFFFFFFFFFFFFFUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUU...!!!!!

Mientras tanto, en el congreso:

-Y por esho la economía eshpañola va a ir cada vez mejor. Nueshtrash politicash de deshtruir empleo de forma mashiva shon... Un momento... ¿Qué esh eshe"fuuuuck" que se oye? ¿Sherá la llamada del amor de mi amada Merkel Gutten Chan?

No tengo escaner, sólo un pisapapeles que se le parece. No pasa nada. En el pueblo hay una librería. Allí me escanearán esto.

Salgo con la furgoneta a velocidad subsónica pasando por las decenas de rotondas y badenes de mi pueblo como una exalación. Llego a la librería. Está cerrada. Obviamente.

El corazón ya va a mil por hora. La hora se pasa y el personal ese cierra alas 17:30. Pensé un sitio al que ir. Sí... ese sitio en el que vendian de todo cuando yo era pequeño: el estanco.

Afortunadamente, al lado del centro de salud hay un estanco gigantesco (sí, lo sé... será para ahorrar tiempo). Seguro que allí tienen. Corro hacia el estanco. No hay sitio donde aparcar. Hay una cuesta muy pronunciada con un aparcamiento detrás de un coche.

-Bueno, este coche tiene huevos. Saldrá sin problemas marcha atrás.

Salgo para el estanco y pregunto.

-Buenas ¿teneis escaner?
-¿Escaner? Ehhhhhhhh...
-...
-Ehhhhhhhh...
-...
-Ehhhhhh... ¡AH! ¡Que si escaneamos cosas!
-(¡NO, QUIERO EL PUTO ESCANER PARA CAGARME ENCIMA Y HACÉRTELO TRAGAR A PATADAS!) Si. Es para este pasaporte, por favor.
-¿Traes dónde guardarlo?

Le doy mi pendrive. Me había olvidado la carterilla en el coche, así que le pregunto cuánto es (cincuenta céntimos, vaya timo) y voy a por el dinero pesando que cuando llegue ya lo tendría listo. Pues no.

Escanear lo escanea en unos pocos segundos, pero para guardarlo en el pen...

-¡Uy! ¿Dónde se ha metido? A ver... hum... ¿Qué nombre le pongo?
-Me da igual.
-A ver... te pongo... ¿pasaporte?
-Me da igual.
-Vale...
-...
-Te lo he guardado como documento 1.
-Vale. Me da igual.

Cojo todo y corriendo para la furgoneta.

Ah, la furgoneta de mi padre. Peugeot Boxer 150cv TDI. Prodigio de la técnica y la automovilística. Potencia, confort y versatilidad unidas en aquel coche. Coche aparcado cuesta abajo, con otro coche delante a diez centímetros, y tonelada y media de batatas dentro.

Meto marcha atrás, piso acelerador a fondo... la furgoneta se va hacia delante. Faltan apenas dos o tres centímetros para darle al coche de delante. Segundo intento, marcha atrás, acelerador...

-[¡BUM!] -Y coche aparcado enfrente avanza medio metro más adelante.
-¡ME CAGO EN TÓ LO QUE SE MENEA! ¡AHORA A MENEAR SEGUROS Y MIERDA Y HACE POCO QUE TUVE UN PORRAZO Y NO TENGO TIEMPO Y SKJGGSJHAGHJAJHGDAJ...!

Pero el milagro acontece. El coche de delante tiene ese maravilloso parachoques llamado "bola de remolque" que ha dejado su trasera impoluta e inmaculada.

-Bueno, le habré reventado el morro al de mi padre, pero ya me preocuparé por eso. Vámonos de aquí YA.

Tercer intento, marcha atrás, acelerador a fondo, quemo el embrague que no ha gastado el coche en diez años y salgo de allí con éxito tras retroceder los centímetros necesarios para que el coche pudiese girar sin topar.

Llego a mi casa, temblando como un flan de los nervios. Mis perros al verme entrar me evitan. Se huelen el motón de ruinas postapocalpticas que en ese momentos conforman mi karma.

Meto el pendrive, cargo el documento, redacto el email, corrigo datos (¿Alhaurin el grande en Granada? ¡Por favor! ¿Marcharme el día 20? ¡NO!) y lo envío. Entonces me fijo en un pequeño detalle... el scan se ve como el puto culo. Apenas se distinguen los números y letras. Es totalmente ilegible.

Decido llamar a la agencia donde lo compré.

-Buenas, he mandado el email que me pedisteis con el pasaporte y...
-¿Es para el Japan Rail?
-(Se ve que se dedican a más cosas) Sí, es para el Japan Rail Pass.
-¿Quien le atendió?
-Bueno... técnicamente no me ha atendido nadie, pero el email me lo ha enviado una tal [inserte nombre de persona amable].
-Ah vale, le paso.

Me pasan con la señorita que inmediatamente me comunica que ya han recibido mi email. Entonces:

-Oye, Gabriel, que el documento que nos has enviado se ve en blanco.
-(WTF?) ¿En blanco?
-Si, no sé que... ¡Ah, espera! Ya ha aparecido algo.

Entonces mi mente enlaza cosas. La imagen no se veía mal porque estuviese escaneada como el culo, sino todo lo contrario. Las miniaturas de las imágenes de alta resolcuión siempre se ven mal. Por eso a la señorita le ha tardado en cargar en su PC la imagen ¿Será esto?

-Oiga, ¿se ve bien?
-¿Cómo?
-Que si se ve bien el pasaporte.
-Sí, sí... ¡Estupendo!

Menos mal. Por fin me confirman que, si salgo el Lunes, procurarán tenerlo listo para que me llegue el Viernes (hoy) por la mañana. Me vuelvo al campo, no si antes darme cuenta de que, para rematar el día, una fila de batatas se ha volcado. Menos mal que el parachoques no ha recibido daños, sólo un pequeño raspado. De eso que me libro. Terminé el día afortunadamente sin más contratiempos y con alguna alegría (examen de japo con 7,2 y posterior cena de despedida a los viajeros).

Hoy ha llegado la cámara nueva, el JRP, y he ido al médico que me ha recetado unas milagrosas pastillas para el estómago.

Ahora mismo soy feliz. Mañana ya se verá xD